Elegir el entorno de desarrollo de aplicaciones (IDE) adecuado es tan importante como la elección del lenguaje, arquitectura, framework o componentes de una aplicación.
Un IDE es un entorno de programación que ha sido empaquetado como un programa de aplicación, incluyendo un editor de código, un compilador, un depurador y un constructor de interfaz gráfica (GUI). Los IDEs pueden ser aplicaciones integradas o el resultado de la integración de herramientas distintas.
Este deberá adaptarse a las necesidades específicas del equipo, facilitando el desarrollo ágil vs. estructurado, la utilización de estándares, la gestión de los cambios, calidad, seguridad y despliegue, cubriendo al máximo todo el ciclo de desarrollo del software.
Nuestra experiencia nos permite diseñar la mejor solución para cada caso, eligiendo las herramientas que mejor se adapten a los requisitos del equipo y validando las problemáticas de integración con otras herramientas o funciones proprias del cliente.